Imagínate que estás en un centro comercial, y que de repente te entra
sed. Decides caminar hacia la sección donde están las botellas de agua y
entonces encuentras botellas de varios tipos. Pero sin embargo te fijas en una concreta, en esa botella de forma estilizada, una botella clara, transparente, de agua del norte, limpia y pura.
Así que está decidido, adquieres esa botella, pero ¿en realidad sabes
el motivo de tu compra? El motivo de tu compra es un marcador somático.
Un marcador somático viene a ser un “atajo” que hace nuestro cerebro para llegar desde A hasta Z en un menor tiempo.
En pocas palabras viene a ser una serie de asociaciones que hacemos de
forma subconsciente y que las marcas intentan provocar. En el caso
anterior ¿has comprado la botella porque fuera la más barata? ¿Porque te
quitara más la sed? ¿Por el diseño de la botella? O en realidad y
subconscientemente porque tu cerebro ha asociado la pureza y la frescura
del agua del norte, fresca, fluyendo por ríos. Me atrevería a decir que
tu decisión de compra ha sido subconsciente.